¡Seis egresados de Derecho PUCP ingresan a la Academia Diplomática del Perú!
Un grupo de seis egresados de nuestra Facultad de Derecho PUCP, luego de un difícil proceso de admisión, ingresaron a la Academia Diplomática del Perú Javier Pérez de Cuéllar en el concurso público de admisión 2024. Este logro representa un paso importante en su camino para convertirse en diplomáticos y servir al Perú en la promoción, difusión y defensa de sus intereses, como miembros del Servicio Diplomático de la República.
Quienes ahora forman parte de los aspirantes al Servicio Diplomático de la República y egresados son los siguientes egresados de nuestra Facultad: Renato Arriola Vega, Jorge Enrique Junior del Valle Vargas, Diego Leonardo Félix Jiménez, Mauricio Garrido Mayer, Francisco Manuel Matallana Pacheco y Emilio Paliza Ortega.
Nuestro ingreso refleja el orgullo de ser parte de la Academia Diplomática del Perú, así como el hecho de ser egresados de esta Facultad, siendo ello parte de la huella y compromiso de la universidad en sus alumnos y egresados: formar ciudadanos íntegros, capaces, con vocación de servicio y siempre bajo el manto de la excelencia.
La carrera diplomática es una profesión apasionante que permite representar al Perú en el extranjero, defender sus intereses y promover su desarrollo. Los diplomáticos trabajan en el Ministerio de Relaciones Exteriores y sus oficinas descentralizadas, embajadas, consulados y organismos internacionales, donde se desempeñan en diversas áreas como política exterior, relaciones económicas, cooperación internacional, entre otras.
El proceso de admisión a la Academia Diplomática del Perú consta de siete evaluaciones. Todas estas son eliminatorias y se desarrollan en un periodo aproximado de dos meses. La naturaleza y rigor de las pruebas demandan una preparación intensa enfocada en el conocimiento de diversas materias y en el dominio de habilidades blandas. En ese sentido, se trata de un concurso altamente competitivo y exige una sólida preparación académica, dominio de idiomas extranjeros, habilidades determinadas (como la oratoria) y análisis crítico, además del perfil psicológico establecido para el puesto.
Este año el concurso contó con varias etapas (las siete evaluaciones antes indicadas), las que se resumen en orden cronológico y concatenado de la siguiente manera:
Un examen de conocimientos generales |
Una evaluación escrita de conocimientos propios del ámbito |
Una evaluación de conocimientos del idioma Inglés a nivel B2 (marco europeo de referencia) |
Una evaluación psicotécnica |
Una evaluación psicológica |
Un examen médico |
Una entrevista personal (la cual incluye la evaluación de conceptos diversos que debe manejar un diplomático, así como la del expediente académico del candidato, que declara al momento de su inscripción al concurso) |
Sólo quienes aprueben todas las evaluaciones y obtengan los más altos puntajes son quienes ingresan y son declarados ganadores (en función del número de vacantes que se asignen para el año del concurso, que este año fueron treinta).
A continuación, nuestros egresados y nuevos aspirantes al Servicio Diplomático de la República nos comparten sus expectativas y aspiraciones:
La carrera diplomática involucra una profunda vocación de servicio por el país de manera que se representen los intereses del Perú en el exterior de una manera idónea y efectiva. Dentro de la Academia Diplomática del Perú espero profundizar mis conocimientos sobre relaciones internacionales, economía y política exterior. Así, espero en el futuro poner en práctica todos esos conocimientos para el beneficio del país. El proceso de admisión a la Academia Diplomática es largo y estresante, se necesita mucha fortaleza mental. No obstante, todo el esfuerzo llega a tener una recompensa inmejorable al tener el enorme privilegio y responsabilidad de servir a tu país.
Durante mi formación universitaria y, luego, en la preparación para postular a la Academia Diplomática del Perú, fui desarrollando y profundizando conocimientos y habilidades que me han convertido en un mejor ciudadano, comprometido con su país y presto para servirlo de forma eficiente y eficaz en lo que se refiere a la defensa, difusión y promoción de sus intereses en el ámbito internacional. En la Academia aspiro a aprender y perfeccionar mis actitudes y aptitudes para representar a mi país con profesionalismo, pasión. También aspiro a contribuir a la promoción de la paz, justicia y desarrollo sostenible del Perú.
La carrera diplomática es una forma de servir al Perú defendiendo sus intereses a nivel internacional y trabajando por los compatriotas en todo el mundo. El proceso de admisión dura aproximadamente dos meses y consiste en una serie de pruebas de conocimiento y habilidades personales. Tras una ardua preparación de largos meses y muchos sacrificios, se logró el objetivo. Para lograr mi meta, fue importante el apoyo de mi familia, el ánimo de mis compañeros durante la preparación, y la excelente formación de la Facultad de Derecho de la PUCP con su variedad de cursos especializados en derecho internacional y su buena plana docente, los cuales confirmaron mi vocación por la diplomacia.
Durante mis años en la Facultad de Derecho siempre me apasionó llevar cursos interdisciplinarios con ciencias sociales y temas de derecho internacional a la par que representaba al Perú en la selección de atletismo. Cuando me gradué fui a trabajar a un estudio de abogados en donde teníamos bastante contacto con embajadas y solíamos trabajar juntos, y fue ahí donde descubrí que la diplomacia era el área donde se armonizaban todas mis áreas de interés laboral con mi pasión por representar a mi país.
En la Facultad de Derecho PUCP tuve el privilegio de aprender bajo los mejores profesores de derecho internacional del Perú, cuyas enseñanzas fueron claves en mi preparación para postular a la ADP. Estos conocimientos me servirán de base en la Academia y a lo largo de la carrera en el Servicio Diplomático. Adicionalmente, tuve la valiosa oportunidad de debatir en el Consejo de Seguridad de PUCP-MUN donde puse a prueba y afiné mis habilidades de argumentación, persuasión, negociación y solución de conflictos, navegando con otros delegados un escenario de imprevisibilidad, conflicto y crisis, en el cual lo más importante ―y difícil― era mantener el dialogo abierto, sincero y diplomático.
Con respecto a la carrera diplomática, es importante resaltar que esta gira en torno al servicio público. En este sentido, se precisa de una profunda convicción cívica que motive la acción servil en favor de nuestro Estado. De esta manera, el personal diplomático orienta su labor hacia la promoción y protección de los intereses permanentes de la República peruana ante diferentes instancias nacionales e internacionales. En esta línea, espero que en los próximos años pueda adquirir conocimientos de diversa índole para ―eventualmente― ponerlos al servicio del país y sus ciudadanos.
Nuestros egresados, como recomendaciones para quienes deseen seguir la carrera diplomática:
A quienes deseen seguir la carrera diplomática, les invitamos a cultivar una formación integral que incluya no solo conocimientos jurídicos y políticos, sino también habilidades interpersonales, idiomas extranjeros y un profundo interés por las relaciones internacionales desde una perspectiva humana. La pasión por el Perú y el deseo de servirlo son elementos esenciales para tener éxito en esta desafiante pero gratificante carrera, por lo que es necesario que quienes estén interesados definan si poseen esta vocación de servicio, pues es una línea de carrera para toda la vida. Además, es necesario estar siempre informado de la actualidad internacional. Finalmente, se sugiere prepararse con tiempo para las pruebas de admisión.
En este sentido, cualquier interesado en participar en este proceso deberá llevarlo teniendo en cuenta la necesidad de adquirir (o profundizar) conocimientos y habilidades como la redacción, comunicación oral, trabajo en equipo, etc.
Consideramos que la formación brindada en la Facultad de Derecho PUCP estuvo orientada al buen desempeño de sus egresados ante situaciones como la descrita.
Finalmente, nuestros egresados expresan sus agradecimientos:
Queremos agradecer a Dios, a nuestras familias, personas especiales, amigos y profesores por su apoyo incondicional durante este proceso, así como a la Facultad de Derecho de la PUCP por la formación en conocimientos y habilidades que nos ha transmitido, inculcado y desarrollado, los que fueron indispensables para ingresar a la Academia Diplomática del Perú. Estamos seguros de que esta nueva etapa en nuestra vida estará llena de aprendizaje, experiencias enriquecedoras y satisfacciones personales. Estamos listos para afrontar los desafíos que nos esperan y contribuir al Perú desde la diplomacia.
En un mundo donde las normas del derecho internacional y el dialogo abierto se erosionan, invitamos a todos los y las aspirantes a recibir la mejor formación académica, y ser bastiones de una diplomacia para el respeto del derecho internacional y la promoción de la paz.
¡Felicitaciones a nuestros egresados!